ASGARD
Hilda de Polaris es la máxima autoridad en el país de Asgard en dónde reina el aire frío y el hielo, su cargo es el de representante en la tierra del dios Odín y su labor es rezar para mantener los hielos congelados y que no inunden el resto del mundo. Hilda se encontraba rezando cuando una extraña voz le ordena que tome el Santuario y gobierne la Tierra. Hilda, quién estaba en contra de la violencia, se niega por lo que la voz se enfurece y pone un anillo en su dedo en contra de su voluntad; al suceder esto, la personalidad de Hilda cambiada a una fría y maligna, declarando la guerra al Santuario y despertando las siete legendarias armaduras de los Dioses Guerreros de Asgard: Thor de Phecda "Gamma", Penril de Alioth "Épsilon", Hagen de Merak "Beta", Mime de Benetnasch "Eta", Alberich de Megrez "Delta", Cid de Mizar "Zeta" y su estrella gemela Bud de Alcor "Zeta" y el líder y más fuerte de los Dioses Guerreros Sigfrid Dubhe de "Alfa".
Pocos días después el Santuario es atacado por Cid de Mizar quien busca la cabeza de Athena y en el trayecto acaba rápidamente con Aldebarán, Jabu y los demás Santos de Bronce. Justo antes de golpear a Athena los Santos atenienses aparecen con sus armaduras reconstruidas con la sangre de los Santos Dorados. Tras un intercambio de ataques con Seiya y Shun, donde estos quedan seriamente lastimados, Cid decide retirarse de la batalla y esperar a los santos en Asgard para la batalla final.
Athena y los santos se trasladan a Asgard donde son contactados por Fleur, hermana de Hilda, quien les cuenta que Asgard se está derritiendo y si eso pasa muchas ciudades quedarán bajo el agua ya que Hilda ha dejado de rezar. Mientras hablaban llega Hilda con los Dioses Guerreros de Asgard y le dice a Saori que en muy poco tiempo Asgard se derretirá inundando el mundo. Saori se da cuenta de lleva puesta la Sortija Nibelungo, creada por demonios para corromper el alma por lo que deben quitársela. Hilda se retira al Palacio de Valhalla y Seiya, Hyoga y Shun salen a pelear contra los Guerreros de Asgard para llegar hasta ella mientras Saori trata de detener el deshielo, sin embargo ya que no es la elegida de Odín, solo podrá detenerlo algunas horas antes de morir.
Thor de Phecda gamma es el primero en presentarse y se enfrenta a Seiya quien no puede hacer nada contra la fuerza del gigante y sus labrys, aun usando el séptimo sentido solo logra que el dios guerrero pelee en serio. Shiryu aparece y le dice que solo pueden quitarle la Sortija Nibelungo a Hilda con la espada de Balmung, que solo puede ser invocada con los siete Zafiros de Odín, incrustados en las armaduras de los dioses guerreros, por lo que derrotarlos se vuelve una necesidad. Seiya decide continuar peleando inspirado por esto y animado por el cosmos de Saori gracias a lo cual incrementa su poder lo suficiente para derrotar a Thor.
A mitad del camino Shiryu es atacado por Phenril de Alioth Épsilon, quien comanda una manada de lobos. Phenril le lastima los ojos de Shiryu y lo ataca en conjunto con los lobos. Sin otra opción el santo usa su puño para destruir un glaciar y crear un alud que mata a su oponente, aunque lo logra, los lobos lo empujan por una grieta en el hielo y Shiryu queda inconsciente en el fondo varias horas.
Hyoga se encuentra con Hagen quién no sólo controla el cosmos del hielo, sino también el cosmos del fuego, además posee resentimiento hacia el cisne ya que ama a Fleur y esta se ha vuelto muy cercana al caballero. Hagen lleva a Hyoga a una cueva en dónde había magma, era el único lugar caliente de Asgard. Hyoga no puede pelear bien debido al calor del lugar y Hagen obtiene así la ventaja. Hyoga intenta convencerlo, pero lo celos del dios guerrero lo ciegan y no detiene sus ataques. Fler interviene protegiendo a Hyoga y Hagen la ataca sin piedad, acusando a Hyoga de cambiarla. Hyoga se levanta furioso y ataca a Hagen con la ejecución de aurora derrotándolo.
Shun repentinamente escucha una melodía muy hermosa pero triste interpretada por Mime de Benetnasch Eta. Ambos pelean pero la cadena no detecta al dios como enemigo ya que este ha inhibido sus emociones desde pequeño. Shun es derrotado aunque incluso utiliza su Nebular Storm y solo se salva de morir gracias a la intervención de Ikki. Aunque el Fenix demuestra mayor poder que su hermano, la ventaja aun la posee Mime, pero gracias al golpe ilusorio de Ikki el dios guerrero acepta que su bloqueo emocional es por haber asesinado a su padre adoptivo a pesar que lo quería. Tras comprender esto, Mime e Ikki deciden pelear como se debe y el santo derrota a su oponente con un solo golpe a costa de quedar herido también, por lo que Shun debe seguir solo mientras su hermano se recupera.
Alberich de Megrez Delta custodia la entrada del palacio y ahí a Marin quien intenta entrar para enfrentar a Hilda directamente. Al pelear, la atrapa en una coraza de Amatista que lentamente le quitará su energía hasta la muerte. Seiya descubre lo que ha sucedido pero no puede pelear en serio ya que Alberich asegura que si muere nada liberará a Marin. Además el dios guerrero revela poseer una espada ardiente con la obtiene la ventaja en la pelea y acaba atrapando también a Pegaso. Su siguiente enemigo es Hyoga, quien representa una gran amenaza para Alberich, pero este revela un tercer ataque llamado la "Unidad de la Naturaleza" que le permite usar la naturaleza del entorno como arma; sin embargo es salvado por Shiryu justo antes de ser atrapado en la amatista; Shiryu quien pelea ferozmente con Alberich, pudiendo contrarrestar la espada y las corazas amatistas gracias a su escudo y la Unidad de la Naturaleza gracias a que Dohko conocía el secreto tras haber enfrentado a un ancestro del dios guerrero, por mucho tiempo la pelea es un empate. En medio de esto el dios guerrero confiesa saber de la maldición de Hilda y que su objetivo es obtener los zafiros y la espada para asesinarla y hacerse con el trono de Asgard. Finalmente después de engañar a Alberich logrando que use el Escudo Amatista, técnica que ya no tenía efecto sobre Shiryu, en vez de la Unidad de la Naturaleza, el Caballero de Dragón pudo derrotarlo con su Dragón Naciente. Ante el esfuerzo Shiryu cae desmayado, por lo que sus compañeros se adelantan confiando que los alcanzará al recuperarse.
Shun sigue su camino dentro del castillo de Hilda y en los corredores del palacio enfrenta a Syd, el Dios Guerrero de Zeta con quien se habían enfrentado al inicio de la batalla, después de enfrentarlo y caer víctima de sus garras y su cosmos venenoso Shun decide usar su Tormenta Nebulosa gracias a lo cual lo derrota fácilmente. Al intentar seguir su camino Shaina, quien fue advertida por Marin que el ataque a Aldebarán no fue llevado a cabo solo por Syd, lo salva de una emboscada de parte de Budd de Arcor guerrero sombra de Zeta y hermano gemelo del dios, aunque sus ataques lucen similares a los de su hermanos son peores, por lo que ni Shaina ni Shun son capaces de derrotarlo, en ese momento llega Ikki, ante su presencia, Budd revela que odia a su hermano porque fue abandonado en la pobreza por sus acaudalados padres y por ello su objetivo es la muerte de Syd para tomar su lugar, tras oírlo Ikki ataca con todas su fuerzas y le da un golpe mortal, antes de lograr acabarlo un moribundo Syd interviene deteniendo a Ikki para proteger a su hermano y que este los mate a ambos, pero ante este gesto Budd se muestra incapaz de matar a su hermano, por lo que abandona la lucha para llevarse el cadáver de Syd.
Seiya llega al gran salón del palacio donde esperan Hilda y el último Dios Guerrero que es Sigfrid Dubhe de Alpha quien tiene fama de invencible y lo demuestra derrotando fácilmente a todos los caballeros, hasta la llegada de Shiryu, quien en un comienzo intenta derrotarlo con el Dragón Final, pero después razona que al ser también un guerrero dragón poseería un punto débil similar al suyo, por lo que se arriesga y en un duelo logra golpear y marcar el lugar de su corazón donde no tenía defensa, tras esto encomienda a Seiya que lo acabe. Una vez combatiendo, a Pegaso le es más fácil con cada ataque lastimar a Siegfried hasta que este cae derrotado.
Tras esto aparece Sorrento un general de Poseidón, quien diera el anillo a Hilda, y que tiene el poder de la melodía maldita de las sirenas, Siegfried se da cuenta que todo es un engaño, por lo que se vuelve de parte de la causa de los Santos de Bronce entregando su zafiro a Seiya y luchando contra Sorrento se sacrifica para llevarlo al espacio con un Dragón Final.
Seiya con los siete zafiros convoca su poder supremo y le es otorgada la armadura del dios Odín y la espada, ya con ella pelea contra Hilda y la derrota cortando el anillo nibelungo liberándola de la maldición, finalmente salvan a Athena y acuden todos al lugar donde Hilda fue poseída; ahí se encuentran con un extraño hoyo en el mar oscuro y se dan cuenta que es un portal a un mundo submarino, de dicho portal sale una voz perversa que es la del Dios Poseidón quien les dice que destruirá el mundo dando inicio una nueva batalla al secuestrar a Saori.
Comentarios
Publicar un comentario